Cómo ser mozo de almacén: requisitos, estudios y cuánto se cobra

Ser mozo de almacén es una profesión al alza, porque el trabajo que desempeñan estos profesionales es pieza importante en el departamento de transporte y logística, esencial, hoy en día, en cualquier mediana o gran empresa.

Las nuevas tendencia en el comercio actual, con el crecimiento imparable de las compras online, han hecho que el mozo de almacén ejerza un papel fundamental en la organización interna de la empresa y en la cadena de suministros.

Las ofertas de empleo no faltan en este sector de actividad y las oportunidades laborales para un mozo de almacén, que cuente con una buena formación y con determinadas habilidades. se incrementan. ¿Quieres saber cómo ser mozo de almacén?… te contamos los requisitos y los estudios que se exigen y también la banda salarial que implica el puesto.

¿Qué es un mozo de almacén?

El perfil de un mozo de almacén es el de un profesional polivalente, que lleva a cabo distintos trabajos, todos ellos relacionados con la recepción, manejo, organización y envío de las mercancías que una empresa requiere para el desarrollo de su actividad.

Supermercados, grandes superficies, centros comerciales, cadenas de ropa y complementos, empresas de envíos, plataformas de comercio online… son solo una pequeña muestra de dónde la funciones de un mozo de almacén resultan necesarias.

Dependiendo de las dimensiones de la empresa y del sector al que pertenezca, el mozo puede requerir cierto grado de especialización, para conocer los productos que maneja y también saber trabajar en equipo para que el almacén se convierta en una unidad funcional capaz de dar respuesta inmediata a cualquier necesidad de venta.

Dependiendo de su nivel de responsabilidad, el mozo debe conocer a la perfección las existencias que guarda el almacén y dónde están ubicadas, teniendo controlado en todo momento las posibles entradas y salidas de mercancías.

¿Qué estudios se necesitan para ser mozo de almacén?

Desde hace unos años, el trabajo de mozo de almacén ha ido incrementando sus funciones. Ya no se trata únicamente de recibir y ayudar en la carga/ descarga de mercancías, sino de realizar múltiples tareas. La progresiva profesionalización del sector es lo que ha hecho que las empresas demanden mozos cualificados con la necesaria formación.

La mayoría exige estar en posesión del título de Graduado escolar o de ESO y especialmente las grandes empresas apuestan por trabajadores que hayan realizado un curso de mozo de almacén que otorgue el correspondiente Certificado de Profesionalidad.

En la actualidad, estos cursos proporcionan la formación necesaria que permite la gestión eficaz de un almacén, por lo que son estudios imprescindibles para acceder a un puesto de trabajo de estas características. Logística, merchandising, técnicas de empaquetado, organización de lineales, registro e inventario, normativa sanitaria y de seguridad en el trabajo… son solo algunas de las materias que se estudian y que hacen posible conocer la dinámica del trabajo en un almacén.

La obtención del carnet de manejo de carretillas y plataformas elevadoras, esenciales para la organización y almacenaje en grandes espacios y el conocimiento de programas  informáticos de gestión aplicados al sector, son también estudios generalmente exigidos para poder optar a un puesto de trabajo en un almacén.

Requisitos para ser mozo de almacén

Además de la necesaria formación, trabajar como mozo de almacén requiere reunir una serie de requisitos y contar con aptitudes y habilidades personales que van a determinar, en gran medida, la calidad y eficiencia en el trabajo.

Algunos de los requisitos que más valoran las empresas de distribución, venta y logística a la hora de seleccionar mozos de almacén son:

• Buena forma física. No se trata de ser un atleta, ya que, el manejo de mercancías en el almacén se realiza con ayuda de medios mecánicos, pero es evidente que el trabajo sí requiere una mínima capacidad, en cuanto a fuerza y agilidad, que permita mover o colocar distintos objetos, alguno de peso considerable, sin que esto suponga un gran esfuerzo para el operario.
• Orden y limpieza. Organizar los pedidos que llegan o parten del almacén es parte fundamental del trabajo del mozo. Mantener un orden, que permita la fácil y rápida localización de cualquier producto resulta esencial,por lo que la capacidad organizativa es requisito básico para el trabajo. Tener buena memoria es un plus a la hora de mantener el control en el almacén. Hacer que ese orden se mantenga y que el almacén esté en perfectas condiciones de higiene es también, en parte, su responsabilidad.
• Trabajo en equipo. Generalmente, las tareas que implica la gestión de un almacén son compartidas. Puede que un mozo se encargue únicamente de la recepción de mercancías y otro de su embalaje para envíos posteriores. Saber coordinar la tarea propia con las de los demás, es también requisito para que el almacén funcione a la perfección.
• Nuevas tecnologías. Juegan un papel determinante en la organización de los almacenes actuales, especialmente en los grandes centros logísticos, por lo que el mozo ha de tener conocimientos básicos de las herramientas informáticas que permiten y facilitan la realización de sus tareas.
• Prevención de riesgos laborales. La persona que trabaja en el almacén debe conocer y aplicar la normativa que garantice su seguridad (y la del resto de compañeros) en el ejercicio de sus funciones.
• Buena comunicación. El trabajo en el almacén requiere el contacto con proveedores y transportistas con los que ser capaz de colaborar a la hora de resolver cualquier incidencia. Del mismo modo, la buena comunicación con el resto del equipo y con el jefe de almacén es esencial para evitar contratiempos que puedan perjudicar a empresas y clientes.

Funciones de un mozo de almacén

Las funciones de un mozo de almacén pueden variar según el tipo de actividad concreta de la empresa en la que trabaje pero, en cualquier caso, entre  las propias del puesto, aquellas que formarán parte de las labores que tendrá que realizar a diario destacan:

• Recibir la mercancía que llegue al almacén, ayudando a la carga, descarga y transporte desde el vehículo en el que llegue, hasta el punto de almacenaje o viceversa.
• Revisar el material recibido para comprobar que es acorde a los pedidos realizados. Además, deberá fijarse en que la mercancía está en buen estado y no presenta desperfectos.
• Colocar los distintos productos en su lugar correspondiente dentro de la organización del almacén.
• Dependiendo de su nivel de responsabilidad, podrá encargarse de firmar el formulario de entregas recibidas y de llevar el registro de los productos almacenados.
• Labores de embalaje y empaquetado.
• Encargarse de atender los pedidos siguiendo las instrucciones de la empresa.
• Realizar envíos bien a centros logísticos o a particulares (en el caso de tiendas online).

En resumen: recibir, gestionar, almacenar y enviar todas las mercancías con las que trabaja una determinada empresa.

Cuánto cobra un mozo de almacén

El trabajo de mozo de almacén registra en la actualidad un alto número de ofertas por parte de las empresas que parten de una banda salarial media que se eleva según la preparación del operario y su experiencia. El sueldo base de un mozo de almacén ronda los 1.100 euros brutos al mes aunque dada la alta demanda de estos profesionales es habitual llegar a un salario bastante superior, que se sitúa fácilmente entre los 1.300 y los 1.400, siempre dependiendo de las funciones concretas, el nivel de responsabilidad, los horarios y turnos… A medida que se incrementa la experiencia, las grandes cadenas de supermercados y empresas de logística ofrecen interesantes subidas. Si hablamos, por ejemplo, de un jefe de almacén, el sueldo mensual no suele bajar de los 2.000 euros.

Cuánto cobra un mozo de almacén en Amazon

La plataforma de comercio electrónico por excelencia demanda con frecuencia mozos de almacén para atender las necesidades de sus centros logísticos de Madrid, Barcelona, Valencia o Sevilla entre otros. El salario bruto mensual de partida que ofrece oscila entre los 1.400 y los 1.500 euros, que se complementan, en ocasiones, con ventajas como planes de formación, planes de pensiones, seguro médico, etc. El atractivo sueldo puede incrementar con la suficiente experiencia y las posibilidades de promoción que ofrece el ‘gigante’ de este sector que no deja de crecer.