Virtudes y defectos para entrevistas de trabajo

¿Estás buscando trabajo? Enfrentarse a la búsqueda de empleo suele resultar un asunto difícil de llevar, empezando con la elaboración del currículum vítae hasta el momento de la temida entrevista de trabajo. Mucha gente comete el error de no preparar correctamente y al detalle cada aspecto del encuentro y tiende a improvisar sobre la marcha.

Esto puede marcar la diferencia entre ser elegido para el puesto o ser rechazado, ya que una entrevista cuidada y con buena actitud puede ser mucho más efectiva en este punto que un buen currículum o que un perfil impresionante en LinkedIn. Así pues, aunque no lo parezca, es una parte muy importante de la búsqueda de empleo que no debe descuidarse en absoluto.

Por eso, en este artículo te traemos las virtudes y defectos que debes mostrar en las entrevistas de trabajo. No sólo hablaremos de lo que debes mostrar, sino como, ya que el lenguaje no verbal puede también jugar un papel muy importante en los escasos minutos que dura el encuentro. Y lo puede hacer tanto para bien como para mal.

¿Qué son “virtudes y defectos” en una entrevista de trabajo?

Antes de realizar dicha entrevista, es importante hacer un trabajo de introspección y poner en valor nuestras aptitudes para saber reconocer cuáles son nuestros puntos fuertes y nuestras debilidades. Debes atender tanto a habilidades personales e incluso a los rasgos de tu propia personalidad. Por ejemplo, si conoces el funcionamiento de un programa en específico o si tienes don de gentes.

Sería mejor que hicieras este ejercicio por escrito para ser mucho más consciente de ello. Con esta sencilla prueba, descubrirás inmediatamente lo que se te da bien hacer y aquello en lo que tienes problemas. Es decir, tendrás escrito un resumen de tus virtudes y tus defectos y podrás aprender a conocerte mejor. Cuando lo interiorices, podrás aprender a usar estas fortalezas y debilidades en las entrevistas.

¿Cómo responder a la pregunta “3 virtudes y 3 defectos”?

Lo más importante es que respondas esta pregunta con toda la honestidad, sinceridad y naturalidad posible. Si conoces tus carencias en determinado campo requerido para ese trabajo, deberías reconocerlo. Pero no te quedes ahí, sino que debes mostrar que aunque tienes una carencia, esto no va a ser problema para ti.

Debes mostrar interés en convertir tus debilidades en fortalezas mostrando interés en realizar cursos para lograr esa habilidad requerida. Por ejemplo, si se te da mal hablar en público y este es uno de los requisitos que se piden para conseguir determinado empleo, deberías mostrar interés por realizar un buen curso de oratoria.

Ejemplos de virtudes para una entrevista.

Pero no te enfoques sólo en tus defectos. Si tienes experiencia o facilidad para realizar cierto tipo de trabajos que se requieren en la empresa, debes decirlo. Muchas veces tendemos a dejarnos llevar por el síndrome del impostor y menospreciamos nuestros propios logros y fortalezas por miedo a que piensen que no seremos capaces de demostrar nuestra valía. Así que, por ejemplo, si se te da bien la fotografía para un puesto de trabajo de fotografía de producto, deberías decirlo y dedicarle su propio espacio dentro de la entrevista.

Incluye dentro de las virtudes no solo tus habilidades, sino también los aspectos positivos de tu personalidad. Por ejemplo, si se te da bien persuadir al cliente y buscas empleo en una empresa de venta de electrodomésticos, hazlo saber. Lo importante es que no mientas en ningún momento y seas lo más sincero posible.

Como hemos dicho en el apartado de arriba, entre las virtudes no únicamente se incluyen las habilidades que se requieren para determinado puesto de trabajo, sino también los aspectos positivos que forman nuestra personalidad. Así que, deberías nombrar en una entrevista las siguientes cuestiones.

El compromiso. Toda empresa quiere contar con trabajadores comprometidos con su labor. Si eres una persona que dispone de esta cualidad, deberías nombrarlo. Aunque ten cuidado, porque esta es una cualidad que muchos empresarios presuponen en sus candidatos.

Una actitud positiva. Una buena actitud genera también una imagen positiva del candidato, porque ya es notable de por sí. Pero si quieres hacer notar que es una fortaleza, hazlo saber.

Sinceridad. La sinceridad es una cualidad muy apreciada por muchos. Si eres una persona sincera, lo debes hacer evidente durante la entrevista. Lo puedes nombrar como una de tus virtudes.

La empatía. Es un aspecto a tener en cuenta en trabajos de atención sanitaria al público u otros orientados hacia lo social. Si eres una persona muy empática, deberías decirlo, porque eso te podría ayudar a conseguir el empleo.

Habilidades o experiencia. Si tienes facilidad para manejar determinado programa informático o experiencia útil para determinadas situaciones en el entorno laboral al que nos dirigimos, deja la modestia a un lado y haz notar que tienes facilidad para ello. De esta manera, tu futuro jefe sabrá que no necesitas formación en determinado campo.

Ejemplos de defectos en una entrevista

Tal y como hemos dicho cuando hemos hablado de las virtudes, en este caso, los defectos no se ajustan únicamente a las habilidades, sino que también se incluyen como tales determinados rasgos de nuestra personalidad.

Timidez. Si eres una persona tímida, eso se va a notar en la entrevista. Pero le puedes dar la vuelta, admitirlo y dejar claro que estás trabajando en ello. De esta manera el entrevistador sabrá que eres una persona sincera.

Te cuesta hablar en público. Si es tu caso, lo primero que deberías hacer es decirlo pero, al mismo tiempo, decir que estás trabajando en ello y que vas a hacer un curso de oratoria.

Poca experiencia. Es un defecto común para todas las personas que se inician en la búsqueda de empleo. Ante todo, no mientas, porque se terminará descubriendo, por lo que es mucho mejor comentar tu falta de experiencia en determinado campo. Puedes complementarlo con la idea de que no tienes ningún problema trabajar duro en mejorar si te contratan para ese puesto. Esto se puede aplicar a casi cualquier carencia, por ejemplo, si desconoces el uso de determinado programa informático o determinado método de trabajo.

Cosas que no debes mostrar en esta pregunta.

Ante todo, lo primero que debes hacer es ser sincero y no mentir. Las mentiras son fácilmente comprobables y cualquier disonancia entre tus palabras y lo que aparece en el currículum va a hacer saltar las alarmas. Si esto ocurre, es muy fácil que seas rechazado de inmediato.

No debes mostrar ningún atisbo de duda y responder siempre seguro de ti mismo y sin faltar a la verdad. No tengas miedo a mostrar tus puntos fuertes y débiles y cómo puedes reforzar los últimos.

Además, te vamos a aconsejar que no debes decir que eres demasiado perfeccionista, ni que eres adicto al trabajo y mucho menos debes negar que tengas puntos débiles. Si dices cualquiera de estas tres afirmaciones, el entrevistador va a pensar de inmediato que eres una persona inmadura. Y ello puede hacer que quedes descartado inmediatamente.

Esperamos que este artículo te haya ayudado a entender cómo funcionan las entrevistas de trabajo. Seguro que, después de leerlo, eres un poco más consciente de que debes prepararlas muy bien con antelación. Ahora sabes cómo averiguar tus fortalezas y debilidades y cómo orientarlas cuando estés ante el entrevistador.